lunes, 3 de noviembre de 2008

¿A QUIÉN LE GUSTA?

Aunque me confieso apolítica, no puedo permirterme caminar sin ética, mermada de valores, con venda en los ojos y dejar de sentirme responsable por lo hecho, lo dicho y lo consentido.
Martes de elecciones en el país de los sueños rotos, de la ciencia ficción y las normas controvertidas. Martes de expectación global. Martes de interrogantes, de alguna que otra esperanza. Martes para cambios, otro Martes de desencantos, de facturas. Y sigue como muchos otros Martes, la violencia, de género, por interés, por error, por miedo, por venganza, por todo y nada...
Pero a quién le gusta la violencia?
Si al color verde no le gusta que lo utilicen para los uniformes militares,
El hierro está cansado que lo usen para las balas,
La tela está harta de que hagan con ella banderas,
Los caminos no soportan que los llenen de minas,
Las lágrimas están cansadas de rodar por el dolor y la tristeza,
Al rojo le gusta ser pintado en las rosas, las cerezas y el carmín, no con sangre inocente,
A las nubes les da retortijones el olor de los bombardeos que las atraviesan,

Y entonces, a quién le gusta la violencia?

2 comentarios:

Jimena dijo...

Parece que evadir la violencia no quita que siga viva en todas partes. La politica es un modo de acercarte a las causas y a los cambios sociales. Es facil tomar una actitud individual en contra de la violencia, pero que padre seria hacerlo masivamente, salir en patines y firmar las calles de fosforecentes compromisos, que nos recuerden a diario que ya no massss... ojala no tenga que llegar tan cerca para comenzar.

Anónimo dijo...

como siempre me gusta,
te extrañamos en la comilona que dimos gracias a Lillia
Verónica