lunes, 10 de noviembre de 2008

Generaciones tras la máscara del "querer ser"

Maggie Carpenter es el personaje que interpreta Julia Roberts en una de sus múltiples películas de corte romántico que ha protagonizado. El filme se llama "Novia Fugitiva" en español, o Bride Runaway, en inglés.
La primera vez que ví esta cinta fue como casi todas las que he visto de ella (debo hacer la excepción de "Closer", la que me pareció muy interesante por su trama). Ya sabes, en el momento te divierten pero hasta ahí llegan. No hay una profundidad de caracteres como tampoco complicaciones. No tienes que pensar, es a lo que me refiero.
La segunda vez que yo ví esta película (lo acepto, me divierte inmensamente volver a ver películas, siempre y cuando me hayan parecido de simpáticas para arriba y tenga el tiempo para hacerlo). Decía, la segunda vez que nos encontramos Julia Roberts y yo, me quedé pensando...¿cuántas Maggies conoces?
Hago la pregunta porque fue esta segunda vez que yo capté que conozco demasiadas, que yo he misma he sido como Maggie Carpenter, duele aceptarlo pero debo aclarar, este personaje de mi vida se fue hace tiempo y no pude encontarlo... a Dios gracias. (JJJJ)
Decía, Maggie Carpenter, haciendo un perfil rápido, es una mujer que se esconde detrás del prometido en turno y la hace desde una novia rockera, otra interesada por la entomología, otra por los deportes y una más, la que cree encontrarse a sí misma aunque diste mucho de haberlo hecho.
El hecho es que hay demasiadas personas que se esconden en lo que esperan que seamos y no enseñan a aquél ser que realmente son.
Hace poco leía un artículo que hablaba sobre las tendencias y las modas y el porqué las seguimos. Jack Santino, un experto en cultura americana (si, el artículo era gringo) aseguraba que lejos de ser malo era sólo el reflejo de una sociedad que busca cobijarse y ser parte de cosas innovadoras y creativas. De ahí que múltiples personas decidan seguir una moda y ahí nos tienen con faldas largas, al siguiente cortas, al siguiente año sin ellas y etc. Seguimos modas hasta que llegamos a una edad en la que decidimos que el largo es lo de menos, pero para haber llegado a esta madurez tuvimos que pasar cuánto, qué o cómos.
¿Cuándo es que se madura y cómo le hacemos para hacerlo más rápido y, como resultado, encontrarnos a nosotros mismos? Ya sea como mujer u hombre. O el entremedio.
¿Es cierto que tiene que ser a golpes? No, no le voy a la violencia física, son los de la vida, dicen, los que hacen crecer. ¿Es que no hay otra forma?
No me conformo pero, yo ya estoy grandecita. Soy quien soy y poco o nada se puede hacer. Son las generaciones pequeñas la que me causan el alboroto...

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