Esta imagen no es Svastopol ni otra calle de alguna ciudad del norte de Europa, no es Canadá, ni Alaska. Es un céntrico bulevar de Girona, ciudad catalana, en pleno mediterráneo. Fué tomada ayer por Bet, una amiga, que entre asombro y congelación me la comparte.Pero la imagen bucólica no muestra el caos que se ha originado en esta región del noreste de la península ibérica. Sin suministro eléctrico por más de 24 horas, carreteras con más de mil coches atascados, árboles caidos y pueblos incomunicados. Pero también es niños disfrutando de la nieve sin escuela y paisajes muy hermosos. Las dos caras de la moneda, pero la nieve se ve muy bonita en la montaña decía mi abuela.
Este año la tierra tiene una contuntende y caótica forma de dar la bienvenida a la primavera por mis tierras catalanas. A mi me ha servido una vez más para sorprenderme y no voy a mentir, también para preocuparme, tengo ahí a mi família que les ha tocado los 40 centímetros de nieve.
Como decía hace unos días Verónica, esta tierra está de lo más alterada, se queja de formas diversas y a nosotros que nos queda? Digo yo que reflexionar, ocuparnos claro, siempre mejor que preocuparnos, pero en hacer un poco mejor las cosas cada día, cuidarnos para cuidarla.
1 comentario:
Lindo paisaje, gran divertida de los niños que en su inocencia solo ven lo bueno, por eso nunca debemos dejar ir a nuestra niña.
Cierto, que hermosa se ve la nieve, allá, en la montaña, como decía tu abuela
Realmente preocupante es el comportamiento de la tierra, temblores, inundaciones, nevadas, sequias… somos nosotros, es un cambio de era o que será, NO SE.
Ya ves como nos ha durado el invierno aquí en la tierra del sol eterno.
verónica
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