Pedirte perdón es como querer
Calmar el mar a patadas, dijiste
Y cuántas fueron tus ganas
Y cuántas fueron de rabia
Y cuántas fueron de amor
En cuántas perdí la esperaza
En cuántas, confiaba el sol
Y tú, con tu rabia labia
La que no calla, ni al mar
Ni a la razón
Y Yo con el silencio, extenso
de haberte arrebatado la devoción
Si de perdones injuro, me atrevo
Hoy, a entregarte lo que quedo
Rómpelo, que no alcanzo
Tómalo, que siguen entre tanto
Las olas que rompen para los dos
sábado, 21 de febrero de 2009
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2 comentarios:
Mi niña, lo lei varias veses y ya lo entendi bien, sabes que soy lenta... esta muy padre me gusto.
Hasta yo me leo varias veces, que bueno q te gusto. Nos vemos mañana
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