Una sesión mas de taller, siempre revitalizante, haciéndonos cómplices, entre escritos, confesiones, anécdotas y risas, conociendo las personalidades, no solo aceptándolas sino admirándolas.
Alguna vez alguien comentó que eran terapias y Margarita se rió, yo tengo que decirle que si son, y mas que eso, son tierra fértil donde nuestros espíritus crecen en cada cita, regados por el agua pura y clara de las ideas de todas.
¡Como las disfruto!
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2 comentarios:
Requeteescritoras, Vero...
Eso de que es una, terapia, hace tiempo lo acepté,porque uno es lo que los otros ven, no lo que uno cree. Y si dijeron eso del taller, entonces la función es doblemente satisfactoria: Crear arte y además componer la autoestima. ¡Fabuloso!
Besho, que estés bien
Yo soy una de las que se ha beneficiado ampliamente de lo terapéutico que es escribir y compartirlo con ustedes, Vero, y lo digo cada vez que puedo. Lo recomiendo a todo el mundo. Es un gran alimento, fuente de motivación y autodescubrimiento.
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